Summary: Nosotros somos Más Que Vencedores sobre cualquier enemigo por Èl que nos amó. En todas las circumstancias de la vida somos más que vencidores por Èl el que nos amó

ROMANOS 8:35-39

MAS QUE VENCEDORES

(El Amor Inseparable de Dios)

[1 de Juan 5:1-7]

Nadie o nada puede separar al Cristiano del amor de Dios en Cristo Jesus. El capítulo 8 es una conclusión gloriosa a las doctrinas magnificas del hombre perdido y la salvación recta de Dios las cuales Pablo sistematicamente nos presentbaba en capítulos 1-7. En los últimos versículos del capítulo 8 presenta el último punto en la discusión de la vida victoriosa antes de que Pablo cambiara el tópico del Israel perdido en capítulos 9-11 . Este paso es el punto culminante, la cima del monte de confianza, desde donde el Cristiano mira a sus enimigos vencidos y mira hacia arriba con la fe completa en el triunfo abundante del amor de Dios. [Estos versículos representa el último paso para caminar en plena confianza en el Amor permanente de Dios para con nosotros en Cristo Jesus.]

El gran amor de Dios para los creyentes en Cristo es la base segura y firme de nuestra sa1vación eterna. El amor de Dios para los en Cristo garantiza que nadie ni nada puede separarlos de Èl ni de Su amor.

Aquí con gran elocuencia el Apóstol fusiona los malignos del mundo natural con los antagonistas del mundo sobrenatural para ensenarnos que nosotros abrumadoramente vencemos por Él que nos amó. Nosotros somos Más Que Vencedores sobre cualquier enemigo por Èl que nos amó. En todas las circumstancias de la vida somos más que vencidores por Èl el que nos amó (ICT)

I. Los Enemigos Naturales de 1a Vida, 8:35-36.

II. La Vida Victoriosa, 8:37.

III. Los Enemigos Sobrenaturales, 8:38-39.

El versículo 35 nos enseña sobre Amor Inseparable. “¿Quién nos separará de amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligo, o espada?”

¿Pudiera algo o alguien separarnos del amor de Cristo? [La Pa1abra en Griego que se traduce separar tiene la idea de la palabra “espacio.”] ¿Pudiera algo o alguien guitarnos el amor de Cristo? Cosas parecidas ocuren entre esposos y esposas. Después de esta prequenta, Pablo nos da una lista que muestra los posibles acontecimentos y dificultades. Las Miremos. “Tribulación” es aflicción externa. “Angustia” es presión o inquietud interna. “Persecución” es mal infligida por su relación con Cristo de hombres hostiles. “Hambre” y “desnudez” son males físicos que priva de alimento y de abrigo de ambas casa y ropa. “Peligo” y “espada” son antonistas violentas.

Si los artículos catalogaron aquí, no pueden separar el amor de Cristo de nosotros, nada en la tierra puede separnos del amor de Cristo. Esta lista no es un intento a enumerar exhaustivamente o clasificar los obstáculos al amor de Cristo. Ellos son simplemente una lista variada de cosas malas. Estos ejemplos del mal como andulan [las ondas] del mar, amenazan enrollarnos debajo de las olas, pero nosotros que amamos al Señor y somos llamados a seguir Sus propósitos (8:8-29) sabemos que cualquier empacto que nos pase seremos sustenidos por el amor de Cristo. Estos males no más apagarían la luz del sol que pueden separar el amor de Cristo de nosotros.

Se da cuenta usted que la separación imposible no es nuestro amor por Cristo sino el amor de Cristo por nosotros. Con demasiada frequencia nuestro amor por Cristo esta separado de nosotros porque no nos ponemos de pie convencidos de que Dios está trabajando todas las cosas, ambos el mal y el bien, por nuestro bien eterno (8:28). Porque a menudo permitimos que las cosas nos separten del gozo, de la esperanza, de amigos, de casi todo lo que hace la vida deseable. Estos males pueden quitar hasta el alma pero el alma y nuestro espíritu eterno, no se pueden tocar.

Cuando un ECLIPSE OCURRE, la luz del sol es obstrida y llega a ser oscuro. Pero aunque la oscuridad haya proyectado su sombra sobre la tierra, no apaga la luz del sol.

Todas estas tristezas externas pueden afectuar la vida externa, pueden matar el gozo mundano, ahogar la esperanza y atarnos en la soledad pero no pueden tocar la más pequena vía del amor que Jesus tiene por nosotros. Y este amor fluirá más abundantemente en nuestro corazón en estos momentos oscuros si somos fieles y confiamos en Èl (Rom 5:5). [ “... y la esperanza no averguenza; porque el amor de ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado." (Romans 5:5)]

Haga de Cristo su causa de gozo y usted nunca estará sin gozo. Haga de Cristo su razón de esperanza y la esperanza estará con usted. Haga que las palabras de Cristo sean sus compañeros constantes y nunca tendrá soledad oscura. La retira [dista] de bendiciones externas no tocarán las santidades centrales y la paz profunda de una vida en comunión con Jesús. Nosotros podemos arrastrar la retirada un ataque de todo, si nostoros hemos encontrado en Cristo, nuestro todo.

Amigos, hay peligro real de que cosas nos apartan [separen] del nuestro amor por Cristo, pero nunca separaran Su amor por nosotros.

Nos habla sobre posibilidad de que sufriríamos por la causa de Cristo en versículo 36. “Como está escrito: Por causa de Ti somos muertos todo el tiempo; Somos contados como ovejas de matadero.”

“Por causa de Ti” signifia que estos sufrimientos están infringidos porque rechazamos el obedecer al hombre para obedecer a Dios

Pablo se apoyá del Antiguo Testamento del Salmo 44:23 para hacer su idea. Salmo 44:23 originalmente fue una suplica a Dios para una ayuda rápida en tiempos de aflicción y dolor. No hay nada extraño o insperado acerca del sufrimiento presente por causa de Dios. Nuestro Señor no solamente predijo nuestro sufrimento (Mt. 5:10-12), ha sido la experiencia de los santos en cada generación.

[La frase "Somos muertos todo el tiempo" es un tipo de martirio continuo que los santos padecan (1 Cor. 15: 31).]

El primer punta fue Los Enemigos Naturales.

El segundo punto es LA VIDA VICTORIOSA (8:37).

Versículo 37 nos enseña que nuestra victoria viene del amor de Cristo por nosotros demostrado en la Cruz de Calvario. “Antes, en todas estas cosas somos mas que vencedores por medio de aquel que nos amó”

Ni las dificultades ni los desastres que los cristianos experimentamos en el mundo no tienen el proposito de separarnos de Cristo pero traernos más cerca de Él. Todas estas cosas malas son absolutamente impotentes a vencer los que están en CristoJesus. Todos estos maldades no pueden evitar que un Cristiano sea un vencedor glorious. A pesar de estas cosas, siempre podemos ser vencedores por Cristo.

Probablemente, ustedes notaron que la Biblia no simplemente dice que vencemos, sino que, “somos más que vencedores.” Lal balanza está inclinada de nuestro lado. La victoria es segura. Nuestro triunfo no será arrebatado de la boca al leon. Nuestra victoria corresponde a la victoria de Cristo en la cruz. Nosotros no simplemente entorpecemos el trabajo de estos enemigos sino que por medio de la cruz nosotros realmente los convertimos en nuestros aliados. Vencemos éstos enemigos con el propósito de que sean amigos y ayudantes en nuestro creciemiento a la imagen de Cristo.

Nota también que la victoria no se gana allá en el cielo sino aquí en ésta vida. Toda la aflicción que nosotros pacientemente aquantamos nos hace más fuertes y nos lleva más cerca de Jesucristo.

¿Comó sabes si los vences o no? Si los males de la vida oscurecen la luz del rostro de Jesus y me hacen menos deseoso de Él, de Su amor, entonces estos enemigos me han vencido. Pero cuando los enemigos de la vida espiritual nos empujan a Cristo y nos acercan a Él en la posesión consciente de Su dulce e invariable amor, entonces los enemigos se han vuelto en nuestros aliados y así nosotros los hemos vencido. ¿Me ayuda el mundo aceracarme más a Cristo? Si, sí, lo he viencido. ¿Me ha atado el mundo en mí seguimento [asimeinto] a Cristo? Entonces si el mundo me ha vencido. La dirección de sus velas y la firmeza en el timón determinan si los vientos le le llevarán a un abrigo de descanso o le empujaran [soplan] hacia afuera a un mar desaliento.

Las palabras “Aquel que nos amó” en la lengua original apuntan a un hecho como ha sido la ocasión del amor. El amor de Cristo nos ayuda a vencer porque en la muerte Él venció el pecado y en la resurrección Él venció la muerte. Si tomamos el poder de la muerte y la resurrección de Cristo como nuestro en cada circunstancia, descubriremos que vencedoros somos, aunque estemos en medio de los enemigos (Ps. 23:5). Nuestra victoria es a traves del camino que Él hizo con Su vida, muerte y resurrección. Si muriéramos a nosotros mismos, al hombre viejo y viviéramos para Cristo, seremos mas que vencedores.

Esta declaración que “ somos mas que vencedores por medio de aquel que nos amó” tiene su origen en una de las más grandes afirmaciones de fe en Dios que jamás se ha escrito. En los versículos 38 y 39 la confianza del Apóstol en la fidelidad de Dios está expresada en un lenguaje más fuerte. Pablo describe a los enemigos sobre-naturales como impotentes porque no pueden fustrar el propósito de Dios y separarnos del amor de aquellos que están en Cristo.

El primer punto era Los Enemigos Naturales De La Vida.

El segundo punto era La Vida Victoriosa y

El Tercer punto es LOS ENEMIGOS SOBRENATURALES.

La conclución asentada en versículo 38. “Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni angeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir . . .”

“Por lo cual estoy seguro”es un indicativo perfecto reflexivo [reflejo] en el lenguaje original. Un significado más amlio sería: “Yo he venido durante un proceso de persuación a una conclusión asentada. Pablo había experimentado todos a los enemigos naturales excepto uno, la espada, ye en el Espíritu de Cristo había luchado contra los enemigos sobrenaturales. También estudió sus doctrinas y experimentó las batallas y terminó convencido de su conclusión.

En la fuerza de su convicción habló de los enemigos sobrenaturales más terrible. “La muerte y la vida” son los extremos de la existencia. El mundo perdido tiene temor a la muerte, pero los Cristianos que ya han muerte con Cristo en Su cruz, sabemos que subiremos con Él. La muerte es solamente el paso último a la presencia de Dios. No es separación de Él. La muerte es la puente última en el viaje hacia la presencia de Jesucristo. Todas las posibilidadas se acaba de mencionar habrán terminada, y habremos vencido abrumadoramente a todos éstos enemigos.

Próximo habla de “angeles, principados y potestades” que son todas las fuerzas sobrenaturales hostiles. Las fuerzas sobrenaturales de males forman una guerra espiritual (a veces física) contra la gente de Dios, pero no pueden separarlas de Él. En Cristo los enemigos sobrenaturales son vencidos abrumadoramente mientras los hijos de Dios permanecen, irrevocablemente protegidos y llenos por Su amor inalterable (Efe. 1:21; 3:10; 6:12; Col. 2:10, 15; 1 Cor. 15:24).

“Lo presente” y “lo por venir” son todas incertidumbres de tiempo. Toda existencia humana puede ser dividida entre éstos tiempos. Nada en el transcurso del tiempo o en la eternidad puede separarnos de Cristo. El día vendrá cuando éste tiempo terminará y éste mundo será destruido y un nuevo tiempo eterno comenzará. Aun cuando éste mundo esté terminado y el mundo nuevo comience, el lazo de Su amor será siempre el mismo.

In versículo 39 encontramos El Amor Triunfa. “... ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesus Señor nuestro.”

La lista de enemigos sobrenaturales continúa. “Lo alto” y “lo profundo” son las extensiones de todo el espacio. Es posible que lo alto y lo profundo sean términos astrológicos. Si es así, no hay ninguna configuración astrológica que pueda controlar o siguiera influenciar nuestro destino. Si lo interpretamos como distancia, sabemos que no hay ninguna manera de distancia que pueda separarnos del amor de Dios.

En caso de cualquier fuente de amenanza que aparezca, Pablo añade esta a inclusive declaración: “...ni ninguna otra cosa creada” El amor de Dios es vencedor sobre todos los enemigos posibles. Cristo es Señor sobre todos los temores y Jefe de toda la creacion. Jesús declare en Juan 10:(27-30), “Mis ovejas oyen Mi voz y yo las conozco y Me siguen, y Yo les doy vida eterna y no perecerán jamas, ni nadie las arrebatará de Mi mano. Mi Padre que Me las dio es mayor que todos y nadie las puede arrebatar de la mano de Mi Padre. Yo y el Padre uno somos.”

DIOS ES SUFICIENTEMENTE poderoso para vencer cualquier obstáculo que la vida ponga en nuestro camino. Nosotros no somos llamados solamente para tolerar nuestros miedos, obstáculos o desventajas. Nosotros aceptamos los eventos que vienen y los cambiamos en buenos porque sabemos que todas las cosas bajo la direción de Cristo pueden ser usadas para ayudarnos y crecer en la gracia de Dios. Por ejemplo, la ostra cuando por accidente se traga una piedrecita en el mar que no puede librar le produce una irritación que con el pasar del tiempo se trasforma en una perla preciosa.

Nosotros también podemos hacer algo hermoso y útil de las dificultades de la vida. [En lugar de separarnos de Dios por nuestras desgracias, debemos de buscar estar más cerca de Dios.]

CONCLUSION

En lugar de permitir los enemigos naturales o sobrenaturales a separarnos de Dios por nuestras desgracias, debemos de acercarnos más a Él que es nuestra fuerza, Amigo Fiel, Padre Eterno y Principe de Paz. Los enemigos naturales y sobrenaturales nos empujan a sujetarnos más a Jesús. Si enemigos tratan de debilitar tú relación con Cristo, sepas que hay una que nos sujeta y es la mano de Cristo que nos asegura que nunca seremos separados de Él. Estamos protegidos por los brazos del amor eterno.

“Y a aquel que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de Su gloria con gran alegria, [25] al único y sabio Dios, nuestro Salvador, sea gloria y majestad imperio y potencia, ahora y por todos los siglos. Amén.” Judas 24,25.