Summary: Al esperara un nuevo año, debemos darnos cuenta que estaremos adentrándonos a territorio extraño. No tenemos idea alguna de lo que nos espera después del primer día del nuevo año. Pudiera traernos gozo, pero también tristeza. Pudiera traernos prosperid

¡Cuán terrible es vivir en tinieblas! Es algo que causa temor y usualmente nos lleva a confusión y estrés. Especialmente cuando uno se encuentra en un lugar extraño. En el mes de agosto, Beba y yo viajamos a Houston, TX para que yo pudiera cumplir con los requisitos de registración en la universidad. Durante esa semana que estuvimos fuera de casa, los hermanos Gonzalez fueron muy considerados y se quedaron en casa para cuidar de nuestros hijos. A nuestro regreso, el hermano Gonzalez nos comentó que nunca había estado en un cuarto tan oscuro como nuestra recámara. El acostumbra levantarse muy temprano en la mañana para ir a trabajar. Pero durante la semana que estuvo en casa tuvo algunas experiencias terribles. No estaba acostumbrado al cuarto ni al lugar donde se encontraban los muebles. Así que una mañana se tropezó con los muebles y hasta se asustó el mismo cuando se percató de su imagen en el espejo que Beba ha puesto junto a la puerta que da hacia el baño. ¿Se da cuenta? La oscuridad puede causar confusión y temor.

Al esperara un nuevo año, debemos darnos cuenta que estaremos adentrándonos a territorio extraño. No tenemos idea alguna de lo que nos espera después del primer día del nuevo año. Pudiera traernos gozo, pero también tristeza. Pudiera traernos prosperidad, pero también pudiera traernos pérdidas. Pudiera traernos salud, aunque también pudiera traernos enfermedad. No sabemos qué esperar. Es como entrar a un cuarto oscuro en el que nunca hemos estado. Aún así, tenemos grande esperanza de luz para el año nuevo. ¿Por qué?

I. PORQUE NUESTRA LUZ HA LLEGADO

“¡Levántate y resplandece, que tu luz ha llegado! ¡La gloria del SEÑOR brilla sobre ti! Mira, las tinieblas cubren la tierra, y una densa oscuridad se cierne sobre los pueblos. Pero la aurora del SEÑOR brillará sobre ti; ¡sobre ti se manifestará su gloria!” (Isaías 60:1, 2 – NVI)

A. El profeta Isaías dio este mensaje a un pueblo que vivía en medio de tinieblas

1. La ciudad estaba a punto de ser atacada por un enemigo extranjero

a. Este pueblo perdería a aquellos que pensaba le daban luz a la ciudad

“¡Presten atención! El Señor, el SEÑOR Todopoderoso, retira de Jerusalén y de Judá todo apoyo y sustento: toda provisión de pan, toda provisión de agua. Él retira al valiente y al guerrero, al juez y al profeta, al adivino y al anciano, al capitán y al dignatario, al consejero, al artesano experto y al hábil encantador.” (Isaías 3:1-3)

b. Perderían su falsa sabiduría la cual ellos consideraban su luz

“¡Ay de los que llaman a lo malo bueno y a lo bueno malo, que tienen las tinieblas por luz y la luz por tinieblas, que tienen lo amargo por dulce y lo dulce por amargo! ¡Ay de los que se consideran sabios, de los que se creen inteligentes! ¡Ay de los valientes para beber vino, de los valentones que mezclan bebidas embriagantes, de los que por soborno absuelven al culpable, y le niegan sus derechos al indefenso!” (Isaías 5:20-23)

c. Perderían aún sus rituales religiosos que estaban vacíos de la luz de Dios

“¿De qué me sirven sus muchos sacrificios? —dice el SEÑOR—. Harto estoy de holocaustos de carneros y de la grasa de animales engordados; la sangre de toros, corderos y cabras no me complace. ¿Por qué vienen a presentarse ante mí? ¿Quién les mandó traer animales para que pisotearan mis atrios? No me sigan trayendo vanas ofrendas; el incienso es para mí una abominación. Luna nueva, día de reposo, asambleas convocadas; ¡no soporto que con su adoración me ofendan! Yo aborrezco sus lunas nuevas y festividades; se me han vuelto una carga que estoy cansado de soportar. Cuando levantan sus manos, yo aparto de ustedes mis ojos; aunque multipliquen sus oraciones, no las escucharé, pues tienen las manos llenas de sangre.” (Isaías 1:11-15)

B. Lo que la gente experimentó en los días de Isaías es muy similar a lo que nosotros experimentamos hoy

1. Estamos bajo constantes amenazas terroristas que oscurecen nuestra mente

2. El pecado en nuestro mundo está fuera de control y oscurece nuestro espíritu

3. Aún las iglesias parecen inútiles y oscurecen nuestra alma

C. Pero en medio de todo esto, Dios nos ha dado una maravillosa luz de esperanza

“El pueblo que andaba en la oscuridad ha visto una gran luz; sobre los que vivían en densas tinieblas la luz ha resplandecido.” (Isaías 9:2)

1. La oscuridad es definida como la falta de luz

2. Si nuestra vida está en oscuridad, es simplemente porque la luz de Dios no está en nosotros

3. Pero la Biblia nos dice que nuestra luz ha llegado, pero la tenemos que aceptar

a. La aceptamos al levantarnos

“Porque la luz es lo que hace que todo sea visible. Por eso se dice: ‘Despiértate, tú que duermes, levántate de entre los muertos, y te alumbrará Cristo.’” (Efesios 5:14)

b. Si no la aceptamos, la oscuridad causará que nuestros ojos no funcionen correctamente

“El ojo es la lámpara del cuerpo. Por tanto, si tu visión es clara, todo tu ser disfrutará de la luz. Pero si tu visión está nublada, todo tu ser estará en oscuridad. Si la luz que hay en ti es oscuridad, ¡qué densa será esa oscuridad!” (Mateo 6:22, 23)

i. Pensaremos ver cosas que no están allí

ii. Pudiéramos no ver cosas que sí están allí

iii. ¡Cuán terrible vivir en tal incertidumbre!

c. Sobre todo cuando que Cristo nos ha llamado a Su luz gloriosa

“Porque ustedes antes eran oscuridad, pero ahora son luz en el Señor. Vivan como hijos de luz” (Efesios 5:8)

i. En oscuridad, no te puedes ver a ti mismo

ii. En oscuridad, no puedes limpiarte a ti mismo

d. Permanecer en la oscuridad del pecado no nos será de ningún beneficio

“Pero el camino de los malvados es como la más densa oscuridad; ¡ni siquiera saben con qué tropiezan!” (Proverbios 4:19)

i. Por eso Dios nos manda levantarnos

¡Nuestra luz ha llegado! Es tiempo de levantarnos de la oscuridad del pecado y permitir que la luz de Dios nos ilumine. Basta ya de dormir bajo las sombras de la maldad. Vivamos en plenitud bajo la maravillosa luz de Dios. No hay excusa ya que nuestra luz ha llegado. Luz para un nuevo año.