El Regalo Inesperado, Negado, y No Abierto
Hay regalos que fueron presentados a Cristo, y debemos ofrecer lo que es de valor a Cristo hoy día también.
Mt. 2:11
Cuando entraron en la casa, vieron al niño con María su madre, y postrándose le adoraron. Entonces abrieron sus tesoros y le ofrecieron presentes de oro, incienso y mirra.
Cristo es nuestro sumo sacerdote hoy, y la Palabra de Dios declara que El también nos dio regalos (presentes).
Hebreos 8:3,4
3 Porque todo pontífice (sumo sacerdote) es puesto para ofrecer presentes y sacrificios; por lo cual es necesario que también éste tuviese algo que ofrecer.
4 Así que, si estuviese sobre la tierra, ni aun sería sacerdote, habiendo aún los sacerdotes que ofrecen los presentes según la ley;
El regalo te ha sido presentado. ¿Cuál es tu actitud con respeto a este regalo?
I. Algo Inesperado
Por miles de años los judíos vivían con la esperanza que un día vendrá su Mesías.
Ellos suenan de un hombre fuerte y poderoso que será su libertador. Hace mas que 2000 años este regalo vino a este mundo, pero la mayoría de la gente no lo aceptó porque esperaba a otra clase de Mesías. Hasta hoy día, la mayoría de los judíos siguen esperando a otro Mesías.
PERO, ¿qué hacemos con este regalo inesperado?
--No podemos ignorarlo.
--Tantas profecías ya han sido cumplidas por El.
--Tantos milagros hizo.
--Tanto gozo trae a todos que le aceptan.
Este regalo no es exclusivo de los judíos; es para todos.
Jn. 3:16
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree no se pierda, mas tenga
vida eterna.
Romanos 2:11
Pues no hay distinción de personas delante de Dios.
Al mejor tu has recibido un regalo este año que no fue esperado. Yo me imagino que ése le dio mucho contentamiento por saber que fue algo no pedido ni merecido. Hay un presente en frente de ti. ¿Qué va a ser con ello?
II. Algo Negado
Sin duda, Cristo vino a este mundo para el beneficio de Herodes también.
1a. Tim. 1:15
Fiel es esta palabra y digna de toda aceptación: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.
Al oir la noticia que nació otro rey, el rey Herodes se puso rabioso. El no pudo aceptar este regalo. Para él fue una amenaza; fue competencia. De inmediato su actitud fue de buscarle para acabarle.
-Nunca fue y nunca es la intención de Dios hacerte sentir mal por su presencia.
-El problema es que uno siente amenazado, porque sabe que este regalo, si es aceptado va a cambiar todo su vida.
-Para muchos, creen que es mas fácil negar este regalo, y seguir con su vida actual.
-Que no dice que este regalo no es para mí, Sí, es para ti. Y ahora tu eres el responsable. Al negarlo es negar lo mas precioso que existe.
-Que no terminas como Herodes. Lleno de celos, lleno de odio, una persona miserable, uno que causó mucho daño y mucha lástima por no haber aceptado el regalo de Jesucristo.
III. Paquete no Abierto
Sería ridículo recibir el presente envuelto y no abrirlo. Pero así hacen muchos.
Tienen el paquete de cristianismo, pero no lo abren para aprovechar de sus beneficios.
Algunos declaran que tienen el regalo, pero no transmiten el gozo y la evidencia de una persona que ha aceptado el regalo en su totalidad.
Al andar con el regalo envuelto es semejante a aquella que anuncia que es cristiano porque pertenece a cierta iglesia ó a cierta familia o porque no toma liquores y no fuma. O que siempre anda con faldas y no se pinta, ni usa los aretes. Pero el problema es que adentro de su corazón, hay un deseo carnal de hacer estas cosas. Es que aquella persona solamente anda con un regalo envuelto y no ha probado de su sustancia.
ABRELO--acéptalo en tu seno. Déjalo producir su efecto. Bájate del trono de tu corazón y permite que Cristo toma Su lugar para gobernar tu vida. Solamente así puedes experimentar el gozo verdadero.
--Al mejor algunos no quieren abrirlo porque no quieren sentir obligados. Esta es la mejor oferta de todas las edades. Tu ganas todo en aceptarlo y lo único que pierdes es el infierno.
Celebramos el nacimiento de Cristo, pero el regalo mayor es para ti.
