Summary: La segunda venida de Cristo es mencionada 318 veces en el Nuevo Testamento. Esto es algo muy importante que debemos considerar. Nada pudiera ser más claro que la enseñanza del retorno de nuestro Señor. Aun así, el apóstol Pablo nos proveyó una descripc

EVENTOS DE LA SEGUNDA VENIDA DEL SEÑOR

“No se preocupen. Confíen en Dios y confíen también en mí. En la casa de mi Padre hay lugar para todos. Si no fuera cierto, no les habría dicho que voy allá a prepararles un lugar. Después de esto, volveré para llevarlos conmigo. Así estaremos juntos.” (Juan 14:1-3 – LBLS).

La humanidad está seriamente preocupada por el futuro. Pero aquellos que leen y confían en la Palabra de Dios pueden vivir tranquilamente sabiendo lo que ha de ocurrir. El rapto y la resurrección de los creyentes son dos eventos maravillosos del futuro y usted puede saber más de ellos si estudia la Biblia.

Después de la crucifixión, Jesús fue sepultado, pero a los tres días se levantó de la tumba. Durante 50 días anduvo en la tierra y finalmente regresó a sentarse a la diestra del Padre. Pero antes de irse, prometió que volvería.

La segunda venida de Cristo es mencionada 318 veces en el Nuevo Testamento. Esto es algo muy importante que debemos considerar. Nada pudiera ser más claro que la enseñanza del retorno de nuestro Señor. Aun así, el apóstol Pablo nos proveyó una descripción muy detallada y una cronología exacta de la segunda venida de Cristo para evitar errores. Hoy veremos estos eventos importantes.

I. EL REGRESO DEL SALVADOR

“El Señor mismo descenderá del cielo...” (1 Tesalonicenses 4:16 – NVI).

A. Cristo volverá de nuevo

1. La Biblia enseña que “el Señor mismo descenderá”

a. Esto implica que no enviará a un representante

i. No será un ángel quien venga por nosotros

ii. Jesús no necesita enviar sustituto alguno

“Entonces aquellos dos les dijeron, ‘Hombres de Galilea, ¿qué hacen ahí, de pie y mirando al cielo? ¡Alégrense! Acaban de ver que Jesús fue llevado al cielo, pero así como se ha ido, un día volverá.’” (Hechos 1:11 – NVI).

2. Los discípulos habían visto a Jesús ascender al cielo

a. Sin duda que se sentían tristes por Su partida

i. A fin de cuentas, nunca hicieron nada bueno por El

ii. Había nacido en la más grande pobreza; desde niño fue perseguido; fue condenado injustamente; fue crucificado; y fue sepultado.

iii. ¿Quién querría volver?

b. Pero ahora habían recibido noticias de Su regreso

i. Jesús ya no volvería como un niñito indefenso

ii. Jesús ya no sería un siervo sufriente

iii. Volvería en gloria y majestad…tal y como lo habían visto partir

II. LA RESURRECCION DE LOS SANTOS

“…con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero.” (1 Tesalonicenses 4:16 – NVI).

A. Es interesante notar que aquellos que han muerto en Cristo serán los que se levantarán primero para encontrarse con el Señor

1. Ellos por ahora duermen en el Señor

“Pero no queremos, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como lo hacen los demás que no tienen esperanza. Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también Dios traerá con El a los que durmieron en Jesús. Por lo cual os decimos esto por la palabra del Señor: que nosotros los que estemos vivos y que permanezcamos hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron.” (1 Tesalonicenses 4:13-15 – LBLA).

a. La muerte para nosotros es un final

b. Para Dios la muerte es el comienzo de un descanso

i. Solamente Dios tiene poder para despertar a aquellos que ahora duermen

ii. Con Su sola voz, levantó a Lázaro de entre los muertos

iii. Con Su sola voz despertó al hijo de la viuda de Naín

iv. Con Sus palabras, despertó a la hija de Jairo

c. Para nosotros la muerte es imposible de vencer

d. Para Dios la muerte ya ha sido derrotada

“¿DONDE ESTA, OH MUERTE, TU VICTORIA? ¿DONDE, OH SEPULCRO, TU AGUIJON?” (1 Corintios 15:55 – LBLA).

i. Ya no tenemos que temer a la muerte

ii. Usted no teme al sueño…por lo contrario, es un tiempo de descanso y renuevo

iii. De la misma forma, el sueno es algo temporal

iv. Aquellos que duermen están con Cristo

v. Aunque el cuerpo esta sepultado, el espíritu esta presente con el Señor

vi. Cristo viene para vivificar cuerpos, no espíritus

III. EL RAPTO DE LOS QUE AUN VIVEN

“Luego los que estemos vivos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados junto con ellos en las nubes para encontrarnos con el Señor en el aire.” (1 Tesalonicenses 4:17 – NVI).

A. El apóstol Pablo nos ensena que aquellos que aun estemos vivos seremos arrebatados para estar con el Señor

1. Arrebatados

a. Esta expresión da la idea de una fuerza que repentinamente es ejecutada

b. Expresa la idea de tomar a una persona y ponerla en otro lugar

c. Cuando Cristo venga arrebatara con fuerza a aquellos que le pertenecen

2. Repentinamente

“En un abrir y cerrar de ojos, cuando Cristo vuelva, se oirá el último toque de la trompeta, y los muertos volverán a vivir y no morirán jamás. Nosotros, los que creemos en Cristo y todavía estemos vivos, seremos transformados.” (1 Corintios 15:52 – LBLS).

a. Este evento será tan repentino que no se puede medir ni calcular

i. No habrá tiempo para arreglar un corazón descompuesto

ii. No habrá tiempo para arrepentimiento

iii. No habrá tiempo para cambiar de actitud

b. Para los que se queden, este será un evento de profunda tristeza

IV. LA REUNION EN LAS NUBES

“Y así estaremos con el Señor para siempre.” (1 Tesalonicenses 4:17 – NVI).

A. Este será un evento sin comparación

i. La iglesia finalmente se unirá a Cristo para toda la eternidad

ii. Ya no habrá muerte ni separación alguna

iii. Todas las gentes de todas las naciones, lenguas y razas estarán allí reunidas como una familia

Conociendo todos estos detalles de la segunda venida de nuestro Salvador, ya no hay necesidad de temer al futuro. Podemos confrontarlo con la firme esperanza de que El volverá pronto para llevarnos a estar con El por la eternidad. Sin embargo, quienes no están preparados para recibirlo vivirán con el terror de no saber que les depara el futuro cercano. Aprovechemos esta oportunidad para volvernos a Dios y esperar Su pronta venida.