Summary: Es necesario que aprendamos a confiar en Dios y en su palabra no importando las circunstancias.

Titulo: Enfrentándote a la pared

Texto: Josué 6: 1-16; 20

Introducción:

Muchas veces nos enfrentamos a situaciones tan desesperantes e increíbles que nos sabemos que hacer frente a ellas. El pueblo de Israel se enfrento a muchos obstáculos los cuales los podían haber detenido pero ellos aprendieron a confiar en Dios.

Es necesario que aprendamos a confiar en Dios y en su palabra no importando las circunstancias.

Proposición: Dios nunca falla y su palabra es verdad.

Transición: El pueblo de Israel se enfrento con una pared inmediatamente después que entraron en la tierra prometida.

I. Dios entrega primero. (6:2)

a. Josué se enfrento contra la primera pared en la tierra prometida – Jericó-.

b. Dios hablo a Josué y le volvió a repetir su promesa de que les había entregado la tierra para poseerla.

c. Josué tenía que aprender a confiar en la palabra de Dios.

Transición: Dios nos da las instrucciones para obtener la victoria en toda situación.

II. Dios da las instrucciones para la conquista. (6:3-5)

a. Dios le dio instrucciones específicas a Josué de cómo conquistar esta ciudad que parecía impenetrable.

b. Dios organizo al pueblo por ministerios o responsabilidades.

c. Dios ordeno que los sacerdotes estuvieran presentes con sus instrumentos de música anunciando la presencia de Dios

Transición: Cuando obedecemos la palabrada de Dios, Dios nos da la victoria.

III. Dios da la victoria. (6:20)

a. El pueblo obedeció a la palabra que Dios había dado, por mas extraña que pareciera.

b. y cuando el pueblo hubo obedecido, las murallas de Jericó cayeron.

c. Dios fue fiel a su palabra, su palabra es verdad.

Transición: Todos nos encontramos con la pared en algún momento de nuestras vidas, cuando obedecemos a Dios podremos marchar derecho hacia el frente y a la victoria.

Conclusión:

1. No importa cual sea la situación o a que pared nos estemos enfrentando, Dios siempre tiene un plan definido para la victoria.

2. Estemos atentos a la voz de Dios en medio de la tormenta y el nos dará la victoria.