Summary: El diablo va a ser todo posible hallar tu precio y comprarte. No te rindes

NO SE VENDE

Hebreos 12:14-17

14 Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.

15 Mirad bien que ninguno caiga de la gracia de Dios; no sea que brotando alguna raíz de amargura, os perturbe, y por ella muchos sean contaminados;

16 que ninguno sea fornicario, o profano, como Esaú, que por un bocado vendió su primogenitura.

17 Porque ya sabéis que aun después, deseando heredar la bendición, fue rechazado, y no halló lugar de arrepentimiento, aunque la procuró con lágrimas.

En Gen. 25:29-34 se encuentra la historia de Esau al vender su primogenitura a Jacob.

Esaú puso mas importancia en los placeres del momento que el valor de lo espiritual y lo eternal.

Según Deut. 21:15-17, el que tiene la primogenitura, tiene derecho de una porción doble de la herencia de su padre.

También fue una bendición testamental.

Por adopción somos heredores y coheredores con Cristo.

Romanos 8:15-18

15 Porque no habéis recibido el espíritu de servidumbre para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el Espíritu de adopción, por el cual clamamos: Abba Padre.

16 El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu que somos hijos de Dios.

17 Y si hijos, también herederos; herederos de Dios, y coherederos con Cristo; si es que padecemos juntamente con Él, para que juntamente con Él seamos también glorificados.

18 Porque tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son dignas de comparar con la gloria que en nosotros ha de ser manifestada.

En el Antiguo Testamento, la primogenitura fue dada a solamente una persona por familia.

En el Nuevo Testamento, la herencia es para todos quienes quieren recibir.

Algunas porciones de la Primogenitura del Cristiano:

1. Paz

2. Amor

3. Gozo

4. Salvación

5. Bautismo del Espíritu Santo

6. Santificación

A Dios no le agradaba lo que hizo Esaú a vender su primogenitura. Así, se propuso su propia sentencia.

JUDAS

Un discípulo quien caminó con Cristo, vio grandes milagro, fue usado por Dios, pero en un momento débil, él vendió su tesoro verdadero por unas treinta monedas de plata.

DEMAS

Un consiervo de Pablo. Un día en el cárcel, se desanimó y vendió su salvación y regresó al mundo. No entendía que la herencia es válida en los tiempos buenos igual como en las tribulaciones.

NABOT (1 Reyes 21:1-3)

Un varón quien reconoció el valor de la herencia de sus padres. Ningún precio fue suficiente para vender su herencia.

La herencia espiritual que tenemos en Cristo vale mas que oro o plata o fama. No tiene precio.

Pero hay un enemigo que siempre quiere disminuir el valor de nuestro tesoro. Desafortunadamente, muchos ya vendieron su herencia por algo temporal.

SIMON (Hch. 8:18-20)

Este hombre se equivicó grandemente, pensando que el valor de lo espiritual podía ser comprado con lo material de este mundo.

La herencia espiritual está en otra categoría. No cree que lo de este mundo puede comparar con este regalo divino.

NO SE VENDE- tu serías el perdedor