Summary: Un fruto de da como el resultado de un proceso, de siembra, cuidado, crecimiento, mas cuidado y finalmente fruto....

En cambio, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio. No hay ley que condene estas cosas. Gálatas 5:22-23 (NVI)

Un fruto es el resultado después de un proceso de crecimiento de un árbol, la calidad del fruto requiere del cuidado que tenga el sembrador con el abono, el riego y también obviamente del tipo de terreno donde fue sembrado.

Muchas veces en la Biblia se habla del fruto en las personas. En este caso de Gálatas 5:22 y 23 se expresa como el fruto que proviene del Espíritu Santo de Dios.

El sembrador y ayudador es el Espíritu Santo. Él se encarga de podar, regar y cuidar diariamente del árbol. Pero el terreno eres tú.

Aplicación personal: Ser un buen terreno significa, entre otras cosas, estar dispuesto a dejar que el Espíritu Santo “te pode” es decir quite lo que no conviene, “te riegue” es decir, te llene de las buenas cosas “nutrientes espirituales” que necesitas. Aunque el proceso no siempre es fácil, te garantizo que la recompensa no tiene precio. El fruto de tu vida será grande y contiene: amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio. En los días por venir veremos cada uno de los componentes del Fruto del Espíritu en tu vida

Palabras Claves para hoy: Fruto Espiritual, Terreno fértil, Espíritu Santo