Dios más grande que mis propósitos
Intro. Este lunes pasado falleció Rosa Lee Parks a sus 92 años en su casa en Detroit en los Estados Unidos. Esta mujer de raza negra, cuando tenía 42 años, era una sencilla costurera que un día salió de su trabajo y se subió al autobús para ir a su casa. La ley en el estado de Alabama en los años 50 decía que la gente de raza negra debía ceder los lugares a la gente blanca. Pero esa tarde Rosa Lee Parks no cedió su lugar; ese día desobedeció la ley y recibió las consecuencias. Fue arrestada y multada. El gesto de desafío de la señora Parks cambiaría la historia estadounidense y le daría el título de “madre del movimiento por los derechos civiles”. El arresto de Rosa Lee Parks de los derechos civiles desató un boicot de 381 días de duración contra el sistema de autobuses organizado por un hasta entonces poco conocido ministro bautista, el Reverendo Martin Luther King Jr.
Esa mañana, Rosa Lee Parks no despertó pensando, voy a iniciar un movimiento en pro de los derechos civiles. Pero esa sencilla acción fue la pieza del engranaje que produjo tanto beneficio para muchas personas, y no sólo en los Estados Unidos.
Nosotros tenemos propósitos, planes, sueños, pero por encima de todo esto está nuestro Dios, orquestándolo todo para cumplir su propósito para nuestras vidas y la historia porque DIOS ES MÁS GRANDE QUE NUESTROS PROPÓSITOS.
I.Dios es más grande que los malos propósitos.
A.Los planes de la gente
1.Las personas hacemos planes, tenemos propósitos, iniciamos sueños. Pero muchas veces esos propósitos, esos planes, esos sueños . . .son malos.
2.¿Acaso no has sido testigo de cómo la gente tiene el propósito de perjudicar a otros? ¿De cómo se hacen planes para acabar con los oponentes? . . .y a veces esos oponentes somos tú y yo.
3.Lo que es peor aún, tu y yo, hemos en alguna ocasión, diseñado un plan con malos fines, nos hemos planteado un propósito que deshonra a Dios, hemos tenido un sueño que va en contra de la voluntad de Dios. De todo esto, por supuesto, somos responsables delante de Dios.
4. Pero hay algo que no debemos perder de vista: Dios es más grande que los malos propósitos.
5.Dios no se ve impedido por mis malos propósitos. No lo toman por sorpresa o lo ponen en aprietos. No lo ponen entre la espada y la pared.
B. El caso de la Cruz
6.Un día las personas se reunieron con el propósito más malvado y perverso que jamás haya existido: acabar con el único hombre justo, con el único digno de gloria, con el hombre más santo que jamás haya pisado la tierra: querían acabar con Jesús. Y lo lograron, mataron infamemente al inocente, al santo, a nuestro salvador.
7.Pero el libro de Hechos 4:27-28, nos muestra que Dios es más grande que los propósitos malvados de la gente:
“Porque verdaderamente se unieron en esta ciudad contra tu santo hijo Jesús, a quien ungiste, Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y el pueblo de Israel, para hacer cuanto tu mano y tu consejo habían antes determinado que sucediera”
8.Herodes, Pilato, los gentiles y el pueblo de Israel se unieron para cometer el crimen más grande de la historia y son responsables por ello. Pero al mismo tiempo, la Biblia nos enseña que Dios, siendo más grande que los propósitos malvados de la gente, usó esas malas intenciones para traer tan grande bien para los que creen en Cristo.
9.Ellos clavaron a Jesús en la cruz con una mala intención, pero Dios, sobrepasando sus malos propósitos, clavó a Jesús para traer la salvación. Porque Dios es más grande que los malos propósitos.
C. Aplicación
1.Hermano, si alguien está haciendo un plan malévolo contra ti, descansa en saber que Dios es más grande que cualquier propósito malo de la gente.
2.Si tienes un sueño o un propósito que sale de la voluntad de Dios, arrepiéntete, cambia tus propósitos por unos que glorifiquen a Dios. Si no lo haces, fracasarás en tus intenciones porque Dios es más grande que los malos propósitos.
II.Dios es más grande que los buenos propósitos
1.Pero también tenemos buenos propósitos, pero aun nuestros buenos propósitos no sobrepasan a Dios, porque él es más grande que nuestros buenos propósitos. El los usa en maneras sorprendentes, más allá de lo que pensamos o imaginamos.
2.Los buenos planes, proyectos, propósitos que están de acuerdo con la voluntad revelada de Dios, tienen el potencial de ser una bomba de bendición a nuestro alrededor.
3.Un día un muchachito fue a escuchar a Jesús y siendo precavido llevó para comer 5 panes y dos peces. Los discípulos estaban buscando alguien que tuviera comida y él estuvo dispuesto a compartir su comida. Y de ese buen propósito, Jesús alimentó milagrosamente a 5000 personas. Un buen propósito sobrepasado por nuestro Dios grande.
4.A veces nosotros pensamos en hacer un bien, pero no sabemos cuánto Dios va a bendecir esos esfuerzos quizá vistos como insignificantes y sencillos, pero todas esas pequeñas acciones forman parte del engranaje de la maquinaria de Dios para avanzar su reino.
5.Dios es más grande que nuestros propósitos, planes y sueños buenos.
6.Mira lo que dice efesios 3:20-21: “Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros, a él sea la gloria en la iglesia en Cristo Jesús por todas las edades, por los siglos de los siglos. Amén”. Efesios 3:20-21
7.El es poderoso para hacer las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos (imaginamos, soñamos, esperamos, proyectamos). Dios es más grande que nuestros buenos propósitos.
8.Por insignificante que te parezca aquel proyecto, sueño, propósito bueno para Dios, no dejes de hacerlo y cumplirlo, porque nuestro Dios grande puede hacer grandes cosas con un sencillo acto de fe y confianza en su poder.
9.Ilustra: Hace 13 años un grupo de cómo unas 20 personas comenzaron a reunirse con el propósito de formar una Iglesia nueva. Ni tenían idea de cómo dirigir una iglesia, cómo organizar el ministerio, cómo crecer cualitativa y cuantitativamente. Tenían sueños y buenos propósitos para ser una iglesia que guiase a las personas a una relación creciente con Cristo. 13 años después mira a tu alrededor y ve lo que Dios ha hecho de la Iglesia Nacional Presbiteriana Shalom. Dios es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o imaginamos.
10.Te animo a no perder tu sueño, tu propósito, tu anhelo de servir a Dios. Él usa ese propósito bueno y es poderoso para hacer las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o imaginamos. Dios es más grande que nuestros buenos propósitos.
Conclusión: Nuestro Dios es un Dios grande. Es más grande que nuestros problemas, es más grande que nuestro pecado, es más grande que las personas, es más grande que nuestros propósitos. El es un Dios grande, que sobrepasa nuestros propósitos malos y los buenos. El es él único que merece nuestra confianza, nuestra lealtad y nuestro corazón.
