Los Salmos 49
La Insensatez De Confiar En Las Riquezas
Para el director del coro. Salmo de los hijos de Coré.
Escuchen, habitantes todos del mundo,
Ricos y pobres juntos.
Y la meditación de mi corazón será entendimiento.
Con el arpa declararé mi enigma.
Cuando la iniquidad de mis enemigos me rodee,
Y se jactan de la abundancia de sus riquezas?
Ni dar a Dios rescate por él,
Y debe abandonar el intento para siempre,
Para que no vea corrupción.
El torpe y el necio perecen de igual manera,
Y dejan sus riquezas a otros.
Y sus moradas por todas las generaciones;
A sus tierras han dado sus nombres.
Es como las bestias que perecen.
Y de los que después de ellos aprueban sus palabras. (Selah)
La muerte los pastoreará,
Los rectos los regirán por la mañana;
Su forma será para que el Seol la consuma,
De modo que no tienen morada.
Pues Él me recibirá. (Selah)
Cuando la gloria de su casa aumenta;
Ni su gloria descenderá con él.
(y aunque los hombres te alaben cuando prosperes),
Quienes nunca verán la luz.
Es como las bestias que perecen.